viernes, 31 de diciembre de 2010

HOLA 2.011


HOY PUEDE SER UN GRAN DIA...
PARA ESCUCHAR AL PÁJARO DEL ALMA
Hondo, muy hondo, dentro del cuerpo habita el alma.
Nadie la ha visto nunca pero todos saben que existe.
Y no sólo saben que existe, saben también lo que hay en su interior.
Dentro del alma, en su centro, está, de pie sobre una sola pata, un pájaro: el Pájaro del Alma.
Él siente todo lo que nosotros sentimos.
Cuando alguien nos hiere, el Pájaro del Alma vaga por nuestro cuerpo, por aquí, por allá,en cualquier dirección, aquejado de fuertes dolores.
Cuando alguien nos quiere, el Pájaro del Alma salta,dando pequeños y alegres brincos, yendo y viniendo,adelante y atrás.
Cuando alguien nos llama por nuestro nombreel presta atención a la voz, para averiguar qué clase de llamada es ésa.
Cuando alguien se enoja con nosotros, el Pájaro del Alma
se encierra en sí mismo silencioso y triste.
Y cuando alguien nos abraza, el Pájaro del Alma,que habita hondo, muy hondo, dentro del cuerpo,crece, crece, hasta que llena casi todo nuestro interior.
A tal punto le hace bien el abrazo.
Mijal Snunit

miércoles, 29 de diciembre de 2010

DIDUJANDO Y CONTANDO


Clase de 4 años Diciembre 2.010
Los niños y niñas dibujan sueños, pequeñas historias, que luego cuentan y el adulto escribe...
El lenguaje se aprende/se enseña para y a través de la comunicación, aunque sirva después para otras funciones, especialmente la de representación.
El lenguaje permite al ser humano proyectar sus reacciones afectivas en el tiempo y en el espacio, lo que colabora a producir una gran capacidad de matización y adaptación de las conductas sociales, al mismo tiempo que las hace menos “estereotipadas” y por lo tanto previsibles.
El “expresar”, el “sacar fuera”, el “decir” lo que uno siente, amplia la diversidad comportamental característica del ser humano.
“El niño que habla” M.Monfort CEPE


Una nave espacial volaba por el cielo. Dentro estaba yo, conduciéndola. Ya tenía 5 años. Al lado estaba otro yo, pero disfrazado de Batman porque era carnaval. La mancha negra era un cohete, dentro estábamos mi primo de 4 años y yo. Fuimos a buscar a los papás que estaban en mi casa con mi bebé, mi hermana Laurita. Vimos un gormiti gris que volaba y pegaba golpes a las casas.
Alejandro M.
Había una vez una caballera que cuidaba el castillo de la Reina. Tenía un campo muy grande alrededor y la Reina quería que la caballera pusiera muchos juguetes, para que pareciera el castillo delos juguetes.
Como la caballera no tenía caballo, la Reina le dejó su coche para que fuera a comprar juguetes.
Le trajo un belén invisible.
Aparecieron muchos niños y niñas para jugar.
Alba
.

Había un pez volador que disparaba al cielo. Tenía un amigo que era un perro. Juntos buscaban un tesoro que estaba en una máquina. Lo encuentran y lo cogen. Al lado estaba un bebé a la sombra del árbol, en una jaula y el pez volador lo salva. Lo lleva a una casa que tiene una flor , pero él no entra porque le gusta volar por el cielo.
Adrián
.
Estaban Papá Noel y los Reyes Magos en el cuento de la princesa. Jugaban a la pelota con el perro.
También estaba el reno y había un trineo y se subían todos en el trineo.
El reno estiraba.
Viajaban volando muy rápido
Eric B.

Había un castillo con ventanas. En su habitación dormía la princesa y el Papá Noel abrió la ventana y le dejó regalos.
Lo esperaban, fuera , camellos que los había cambiado por su reno a los reyes magos. Ellos también estaban fuera.
La princesa se despertó porque Papá Noel le dio un susto. El cuento estaba vacio y se fueron todos a comer juntos.
Jorge
Había una princesa que se llamaba Blancanieves. Jugaba con las flores y se pintaba ella solita. Le gustaba estar guapa. Tenía dos amigos: Mauro y Alejo.
Le regalaron un cuento porque era su cumpleaños.
El cuento era de una princesa que se sentaba en un banco y no hacía nada, hasta que un día aparecieron Papá Noel y los Reyes Magos y se pasó la vida jugando.
Irene


Es una princesa que está contenta en un campo, jugando con la mariposa y la flor. Ha parado de llover y les cuenta el cuento de Papá Noel y los Reyes Magos a todos. Los personajes salen del libro con camellos, pero el perro se queda dentro porque no se da cuenta.
La princesa entra en el cuento porque oye :
“guau, guau” y saca al perro. Se ponen todos a jugar y están felices.
Andrea
La princesa estaba caminando por el bosque . Encontró un sitio para hacer deberes. Tenía que hacer matemáticas, hizo muchas hojas. Se cansó y se quedó dormida con la corona puesta.
María

El pez volador vuela muy alto y rápido por todos los sitios. Busca su casa que está arriba de un árbol. Allí le esperan sus papás que también son voladores.
Los pájaros tienen un regalo y lo tiran al mar para que se lo coma la ballena. Es lechuga y la ballena esta contenta y se hunde porque viene un barco.
El niño lo mira todo, no vuela pero se disfraza de pájaro.
Joan
Era una princesa que se llamaba Aurora . Miraba su castillo que era pequeñito, pero muy bonito. Estaba enamorada del príncipe y él le regala una flor.
Debajo del árbol leía un cuento de flores que se morían porque les echaba mucha agua. Ella aprendió que tenía que regar menos las plantas, así podría tener un campo con muchas flores cerca del castillo.
El príncipe y la princesa cuidaban las flores.
Aitana

lunes, 13 de diciembre de 2010

LA CAJA DE LA LUNA "

Una caja para la luna.
Propongo a los niños una nueva actividad A PARTIR DEL CUENTO:

Hacer una caja, para dejarle cosas a la luna, para que no se sienta sola.
En la asamblea deciden que le podrían traer cosas y decorar la caja.
Cada uno dice lo que le dejará a la luna y para qué se lo deja.
Mauro: Un osito para que duerma con él.
Andrea: Una mariposa con un corazón para que sueñe y lo guarde en su casa.
Valeria: Un coche pequeño para que juegue.
Eric B: Un libro que canta, para que aprenda a cantar en alemán.
Joan: Un corazón para que la abrace.
Iván: Un Cíclope pequeñito, para que juegue con él.
Aitana: Una mariposa y un papel para que se quede muy bonita.
Iris: Un avión para que vuele.
Laura G. : Un circo gigante para que juegue tranquila.
Jorge: Un corazón de papel para que esté contenta.
Irene: Un avión para jugar.
Eric M.: Un coche potente para que corra mucho por el cielo.
Pablo: Una mariposa grande para que tenga alas y vuele.
Alejo: Un muñeco para que juegue.
Pau: Un coche mío. Para la luna.
Alejandro G.: Un pez Nemo de peluche, para que sueñe con una moneda de chocolate.
Laura B.: Un avión de juguete para que vuele la luna.
Alba: Un barco de juguete para que juegue con sus muñequitos.
Adrián: Una manta para dormir, que tiene sueño.
Alejandro M.: Un coche para jugar.
Didac: Un dragón que tenga cuernos, manchitas azulitas muy claritas y que sea azul. Para que duerma bien.


Como siempre...
Dejo que ellos decidan como canalizar sus emociones...
La luna de “Cuéntame” y las palabras que la acompañan les hacen soñar?
Hoy lo tienen complicado...
Antes también lo teníamos pero...
Y seguimos...
Cuéntame...
Tus cosas...
Y la luna escucha...
Así que hemos establecido una comunicación con la luna...
Le han dejado, el tiempo que quiera, sus cosas... Su juguete, un dibujo, un pañuelo para limpiarse, por si está constipada....

EL ÁRBOL BLANCO

OTRO CUENTO DE NUESTRO TALLER DE BIBLIOTECA
Este trimestre la clase de 4 años no para...
En cada uno de mis blogs he dejado un cuento:
En http://www.menjalletres.blogspot.com/ el cuento de una casa, con casas.

"El árbol blanco"
Un cuento gigante con unas hojas que llevan dibujada su historia...

HABÍA UNA VEZ UN TRONCO BLANCO, CON RAMAS, PERO SIN HOJAS.
LAS HOJAS TENÍAN FRIO PORQUE CAÍAN BOLAS DE NIEVE Y SE ESCONDÍAN DENTRO DEL TRONCO.
COMO ERA INVIERNO, TAMBIÉN LLOVÍA Y LOS PAJARITOS TENÍAN FRIO PORQUE LA LLUVÍA LES MOJABA LAS ALAS E IBAN CAMINANDO POR LAS RAMAS DEL ÁRBOL.


ALGUNAS HOJAS Y LOS PERSONAJES QUE VIVEN EN ELLAS...

EN LA HOJA VIVIA UN DRAGÓN QUE JUGABA CON LA NIEVE PORQUE ERA INVIERNO.
ERA UNA DRAGONA, PORQUE ERA CHICA.
SE LLAMABA MINI.
SE DIVERTÍA MUCHO.
HIZO UN CÍRCULO CON LAS BOLAS DE NIEVE.
ANDREA



EN LA HOJA ESTABAN BOB ESPONJA, CALAMARDO Y PATRICIO ESTRELLA.
JUGABAN EN LA HOJA CON LA PELOTA.
SE LES CAYÓ LA PELOTA Y UNA BOLA DE NIEVE EN LA CABEZA DE PATRICIO.
UNA MEDUSA LO SUBIÓ CASI AL CIELO Y BOB ESPONJA HACÍA LA RISA PARA QUE PATRICIO SE RIA Y SE LE PASE EL SUSTO.
ERIC B.


EN LA HOJA ESTABA UN PERRITO QUE SE LLAMABA “MINE”.
JUGABA CON LA NIEVE DE LA HIERBA Y SE LO PASABA MUY BIEN.
LLAMÓ A SU AMIGA, LA HIERBA, PARA JUGAR CON ELLA Y LE HICIERA COSQUILLAS ESCONDIDA EN LA NIEVE.
LA NIEVE SERVIA PARA QUE JUGARAN.
MARIA

HABÍA UN SOL DENTRO DE LA HOJA PARA QUE EN EL INVIERNO SALIERAN FLORES.
UNA NIÑA, QUE ERA YO, MIRABA LAS FLORES Y ESTABA CONTENTA.
TENÍA UNA BICI Y PASEABA POR LA HOJA Y TENÍA EL PELO DE COLORINES. ME LO HABÍA PINTADO MI MAMÁ.
HABÍA MÁS SOLES QUE JUGABAN Y TAMBIÉN SE DIVERTÍAN: COGÍAN EL PATINETE, SABÍAN PATINAR Y SE PASEABAN POR LA HOJA.
LAURA B.


EN LA HOJA HABÍA UN CONEJO QUE SALTABA Y JUGABA CON SUS JUGUETES.
SE IBA AL JARDÍN DE LA HOJA Y SALTABA.
TENÍA UN AMIGO QUE SE LLAMABA JORGE Y JUGABA CON ÉL A LA PELOTA.
IRENE

EN LA HOJA VIVÍA EL FANTASMA U
QUE JUGABA CON SU ESTRELLA Y SUS BOLITAS DE NIEVE. SE DIVERTÍA MUCHO. SU AMIGA ERA LA LETRA I Y JUGABAN AL CORRO DE LA PATATA.
AL FINAL COMO JUGABAN TANTO CON LOS JUGUETES, UN JUGUETE SE ROMPIÓ Y TUVIERON QUE IR A UNA TIENDA A ARREGLARLO. Y YA APRENDIERON A JUGAR BIEN CON LOS JUGUETES.
ALBA.


HABÍA UNA VEZ UN MÓVIL, UN COCHE Y UN AVIÓN.
YO, CON MI MANO HACÍA VIENTO Y VOLABAN LAS MARIPOSAS Y LOS PUNTOS BLANCOS SE CONVERTÍAN EN GELATINA. LA PEGABA EN LA SILLA, PERO CUANDO HACÍA SOL SE DERRETÍA.
ADRIÁN

jueves, 21 de octubre de 2010

BINOMIO FANTÁSTICO/ RECORDANDO A RODARI EN SU 90 CUMPLEAÑOS

TXEMA CAÑADA


UN SOMBRERO CON ELEFANTE
Dolors Todolí


Me llamo Aurelio. El nombre lo he heredado de mi padre. Y es que Aurelio es un nombre que va pasando, generación tras generación, al primogénito de mi familia. Todos mis primos se llaman Aurelio, y para distinguirnos tenemos motes. A ninguno nos preguntaron si queríamos llevar ese nombre, simplemente nos tocó por haber nacido los primeros. A mí me llaman Aurelio “prisas”, porque siempre voy corriendo a todas partes. Y es que me gusta correr. Pero todavía no he hablado de lo más importante, del día en el que mis sueño de ser corredor de maratón se esfumó para siempre.
Hasta aquella mañana mi existencia había transcurrido sin ningún contratiempo, demasiado lenta para mi gusto, demasiado ordenada por obra y gracia de mi madre y, sobre todo, demasiado aburrida, sin que nunca hubiera ocurrido nada extraordinario
Pero todo cambió cuando baje a la calle. Iba corriendo, pero sin prisa. Al doblar la esquina lo vi y por un momento pensé que seguía dentro de mi sueño. Allí estaba aquel extraño ser esperando a que el semáforo se pusiera verde.
Me pellizque en el brazo.
- ¡Ay! – exclamé. Eso duele.
Confirmé de esta manera que estaba despierto.
Atónito, seguí mirando. La gente, como siempre, ajena a todo lo que pasaba a su alrededor. Solo yo parecía percatarme de su presencia.
Me coloqué a su lado.
-Buenos días- dije.
-Buenos días- me respondió el sombrero.
-Parece que va a llover – continué diciendo mientras miraba el cielo. Que es lo que la gente mayor suele decir cuando no tiene otra cosa de la que hablar.
-Si, eso ha dicho el hombre del tiempo.- me contestó el sombrero de copa. Por eso hoy me he puesto el elefante en la cabeza. Es lo mejor para los días que amenazan viento y lluvia.
-Un poco pesado. ¿No le parece?- respondí
-El sombrero del tiempo ha dicho que se desataría una fuerte ventisca. No me gustaría rodar por el suelo. – me contestó.
-Bien pensado- dije
Mientras, seguía sin comprender como podía seguir allí manteniendo aquella conversación estúpida con un sombrero.
-Bueno, se ha puesto en verde, niño. Mucho gusto- me dijo el sombrero de copa.
-Lo mismo digo- contesté.
El sombrero cruzó la calle. Intenté hacer lo mismo, pero se desató una fuerte ventisca que me arrastró rodando por el suelo.
Desde la acera de enfrente el sombrero me gritaba:
- ¡Ya te lo dije, niño! Lo mejor para los días que amenazan ventisca es salir preparado.

BINOMIO FANTÁSTICO: SOMBRERO/ELEFANTE

"RECORDANDO A RODARI
Y SU "GRAMÁTICA DE LA FANTASÍA"
Gianni Rodari, escritor, maestro y pedagogo italiano
(Omegna, 23 de Octubre de 1920)
“…Una palabra lanzada al azar en la mente, produce ondas superficiales y profundas, provoca una serie infinita de reacciones en cadena implicando en su caída sonidos e imágenes, analogías y recuerdos, significados y sueños…”

“…Una palabra cualquiera elegida al azar, puede funcionar como palabra mágica capaz de desenterrar campos de la memoria que yacían bajo el polvo del tiempo…”

“… personalmente, he inventado muchas historias partiendo de una palabra elegida del azar."

“…El juego de la piedra en el estanque, debe servir a los niños, y no servirse de ellos.”

Gianni Rodari.

miércoles, 29 de septiembre de 2010

CUÉNTAME

24-9-2.010 (Clase 4 años " Gregori Mayans" Gandia)
Un recién nacido que nos dice:



Hoy al llegar a la clase nos esperaba un cuento de luna sentado en una silla. Ha esperado a que llegara el silencio para abrirse y esperar a ser contado.


Y empieza así…
“ Todos soñamos…Algunos sueños nos acompañan siempre, cerramos los ojos y aparece..."
Después de ser contado, el cuento se cierra y quiere volver a soñar…Le preparamos una cama y lo tapamos con mimo, para que descanse


Y tenemos ganas de soñar…
Con la música de “Amelie”, muy bajita…
Después de soñar, les enseño la caja de la luna, una caja llena de objetos que recoge de los sueños de las personas.
Y luego cada uno dibuja su sueño y pinta la noche….
Poco a poco irán contando su sueño, lo escribiremos e iremos haciendo un libro…



Una lupa para hacer grandes las cosas pequeñas, una estrella de mar que sueña con brillar en el cielo, piedrecitas de colores, transparentes, blancas recogidas en los caminos de los sueños

He soñado con una luna grande que coge estrellas para ponérselas en el pecho y anda por la carretera y coge un coche para irse a la feria y sube a los cochecitos. IRENE



He soñado con un dragón con cara que es bueno y hace payasadas y baila por la calle y se llama como mi padre: Mauro. Vive por el mar y se encuentra con un pez y cuando se encuentra con el pez va a por los dos un tiburón y luego viene una araña por el mar que cuando se enfada está contenta. VALERIA

He soñado un monstruo que se cayó de la cama y lloraba. Vino la mamá del monstruo y lo curó. El monstruo se puso a correr. ALEJANDRO M.


Mi sueño ha sido con coches y aviones que van por el cielo. Los coches van por la carretera del cielo y la luna desaparece para que no la pisen. JOAN
-Cuéntame...
Una caja de la luna ha llegado a nuestra biblioteca del aula...
Para guardar los sueños...
GRACIAS PEDRO POR TUS SUEÑOS Y A MARIA POR SU PINCEL DE LUNA

miércoles, 5 de mayo de 2010

MIGUEL HERNANDEZ


KALANDRAKA se suma a la conmemoración del centenario del poeta Miguel Hernández con la edición del libro “Miguel Hernández: 25 poemas ilustrados”, que llega esta semana a las librerías y en el que colaboran figuras destacadas del panorama plástico a nivel estatal. Se trata de una cuidada edición en la que se hace un recorrido cronológico por la obra del autor oriolano. Cada poema fue traducido al lenguaje del Arte a través de la pintura, la escultura, el diseño o la fotografía. El resultado final de esta experiencia colectiva es un trabajo literario y creativo que transmite sensibilidad, compromiso y emoción. La obra, dirigida a público juvenil y adulto, se presentará mañana en Orihuela, la ciudad natal del poeta.


domingo, 25 de abril de 2010

CUENTOS DE HADAS



Parece que los denominados Cuentos de Hadas levantan una nube de polémica en este reciente siglo XXI.
En aras del fomento de la igualdad entre la infancia y la prevención de la violencia de género, el Ministerio de Igualdad, con Bibiana Aído a la cabeza; el Instituto de la Mujer y el sindicato FETE-UGT, sientan en el banquillo a los cuentos de hadas acusados de sexistas y violentos. No los quieren inhabilitar – dicen – sólo penalizarlos un poco para adaptarlos.
Entre la polvareda de la nube levantada se encuentran posturas y pareceres de toda índole. Sin embargo llama la atención que entre unas y otra opiniones, bajo las denominaciones de “Cuentos tradicionales” y “Cuentos de Hadas” se meta indistintamente en el mismo paquete a Perrault, a Disney, a los hermanos Grimm, a Andersen… ¿Acabarán también en el lote Carlo Collodi (Pinocho), James M. Barrie (Peter Pan) o Lewis Carroll (Alicia), entre otros?
El término “Cuentos tradicionales” es un tanto impreciso, aunque generalmente hace más bien alusión a los cuentos de tradición oral. Los llamados “Cuentos de Hadas” (tanto si en ellos aparecen o no explícitamente hadas), se denominan también “Cuentos maravillosos o de encantamiento”. Y se trata de historias de origen remoto heredadas de la tradición oral universal.
Posteriormente aparecen a lo largo del tiempo y el espacio figuras como Perrault, Afanasiev o los hermanos Grimm que, conscientes de que ese valioso legado oral podría perderse con el paso de los años, deciden recogerlo por escrito. De esos textos surgen diversas versiones.
Siguiendo el curso de la historia, encontramos a Hans C. Andersen que, basándose en la estructura tradicional de los cuentos de hadas, crea su propia obra como autor literario. Muchos otros escritores ofrecerán a lo largo del siglo XIX y XX grandes obras literarias ya denominadas “clásicas” de la literatura infantil.
¿Y Disney? Bueno, él es punto y aparte. En los cuentos de hadas y clásicos de la literatura infantil llevados a la pantalla por el propio Disney o su factoría, se dan importantes distorsiones. En las versiones Disney, las historias pasan por un tamiz de edulcoración melosa, las obras literarias originales son gratuitamente simplificadas y deformadas. Y buena parte de las simbologías más profundas de los cuentos desaparecen de un plumazo siendo escamoteadas por estereotipos ñoños. Lo más grave de todo: un elevado porcentaje de sus espectadores nunca ha accedido a las fuentes originales de esas historias y muchos, incluso ignoran su existencia.

Aclarados los contenidos del gran paquete-cajón de sastre, vayamos a los cuentos de hadas.
Desde que la humanidad habita la faz de la tierra, no se conoce en el planeta un solo pueblo, una sola etnia, que no haya creado su tradición oral. Las fueron construyendo, en tiempos remotos, desde la más absoluta ausencia de tesis o análisis sesudamente conscientes. Y, curiosamente, por distintas y distantes que sean las culturas, todas coinciden en imaginarios de rasgos comunes. En todos los cuentos del mundo se repite gran número de elementos simbólicos similares o incluso idénticos, por más que se trate de culturas que nunca han estado en contacto.
Como parecen argumentar las mentadas instituciones que sientan a los Cuentos de Hadas en el banquillo, no se trata, pues, de que haya en ellos multitud de “estereotipos”, lo que hay es una enorme riqueza de “arquetipos”, es decir: de imágenes o esquemas congénitos con valor simbólico que forman parte del inconsciente colectivo (Diccionario de la Real Academia). Y éstos suelen ser más ricos y complejos en tanto en cuanto se ajustan a las versiones más primitivas; menos penalizadas y menos “manoseadas”.

Lo que ocurre, es que el lenguaje de los cuentos de hadas, como el de los mitos, las escrituras sagradas e incluso (me atrevería a decir) el de los sueños, no le habla directamente al raciocinio consciente y analítico. Lanza, más bien, sus palabras como dardos directamente a las dianas del inconsciente simbólico.
La mente primitiva y la mente infantil no escuchan este lenguaje con el oído literal con que se escucha una noticia del telediario para, acto seguido, proceder a analizarla (ni falta que les hace). Las palabras del cuento de hadas entran por un oído por el que atraviesan capas mucho más profundas e irracionales. Esas palabras hablan sobre la vida, sobre los conflictos de la existencia humana y le transmiten al niño asuntos que ni el más concienzudo y elaborado discurso literal lograría comunicarle.
¿Sería capaz algún adulto de responder con una sola opción a preguntas como éstas?:
¿Es usted una persona bondadosa o malvada?
¿Se siente un dechado de virtudes o un ser abominable?
¿Es una persona valiente o cobarde? ¿Sabia o ignorante? ¿Pacífica o agresiva? ¿Hábil o torpe? ¿Con formas de proceder netamente femeninas o netamente masculinas?...
La mente infantil sólo comprende este tipo de conceptos por contraste de contrarios, su estadio de desarrollo todavía no entiende de claroscuros. De modo que, cuando escucha un cuento, tan pronto puede estar identificándose con el listo/a como con el/la torpe, con el/la valiente como con el/la cobarde o, simultáneamente, con éste, la otra y el de más allá. Y si aquello que le está ocurriendo por dentro le interesa mucho, escucharemos a la criatura insistir hasta la saciedad diciendo: “Cuéntamelo otra vez. Otra vez. Otra vez…”
Cuando un adulto narra un cuento a veinte criaturas, cuenta un solo cuento, pero los receptores están escuchando veinte cuentos.
Añadamos una pregunta más:
Su madre de usted ¿es una mamá bondadosa o más bien una madrastra?
La respuesta es sencilla, no se puede optar por esto o por lo otro, en toda madre se fusiona una mamá y una madrastra, pero el lenguaje del cuento necesita disociarlas para perfilar las dos caras de una misma moneda, pues el niño la experimenta como dos entidades separadas.
El lenguaje de lo políticamente correcto está a años luz del lenguaje de los cuentos de hadas. A través de éste, una sola criatura puede convertirse en continente de todos los personajes que aparecen en la historia, de todos y de todas.
En cuanto a la violencia, ni qué decir tiene que es un rasgo natural del ser humano. Que se puede manifestar en nuestro interior y en nuestro entorno externo y que, si al niño no se le previene con cuentos de la existencia de brujas, que haberlas haylas como hay ogros, lobos y otros depredadores, ya sean internos o externos; un día, inevitablemente, se encontrará con ellos y se lo zamparán. Los cuentos avisan, además, de que el mayor de tus depredadores puede habitar en ti mismo/a.
Precisamente por la profundidad de lo que transmiten, necesitan finales felices que resulten alentadores e inyecten la esperanza suficiente en la vida para el crecimiento. Del mismo modo que requieren ser narrados en un contexto emocional cálido y protector.

Ahora bien, ¿que aparecen rasgos sexistas en determinados perfiles femeninos y masculinos de ciertos cuentos de hadas (y ojo a las versiones elegidas)? ¡Por supuesto! Exactamente igual que en una buena parte del legado de una Literatura Universal desarrollada en el seno de sociedades machistas desde sus ancestros. Pretender resolver de un plumazo más de 2000 años de historia con unas formulitas de igualdad, parece una presunción con visos de omnipotencia.
¿Qué hacemos, Sra. Aído? ¿Le damos también unos retoques igualitarios a la Dulcinea del Quijote? ¿Repudiamos las novelas de Caballerías desde el Amadis de Gaula? ¿Hacemos una limpieza a fondo de nuestro Refranero, Romancero o incluso de la Mitología clásica? ¿Desechamos, por ejemplo, El Principito? En sus páginas los únicos personajes femeninos que aparecen son una flor engreída y caprichosa y una serpiente de dudosas intenciones.

Desde la Campaña Educando en Igualdad lanzada por el ministerio, el instituto y el sindicato mencionados, en una de sus guías podemos leer (ahora sí, literalmente), lo siguiente:

Es bueno, por lo tanto adaptar los cuentos y sobre todo, educar con ellos. Y por educar entendemos ayudar a los niños y niñas a desarrollar un sentido crítico, su comprensión del mundo y —función primitiva de los cuentos— a discernir entre el bien y el mal. Los valores que defiende FETE UGT para la educación son los que desea una sociedad democrática, plural, respetuosa con la diversidad y defensora de la plena igualdad entre hombres y mujeres. Estos valores se enseñan desde la escuela y desde la familia y desde los demás agentes educativos. Renunciar a posturas machistas que inculcan a los chicos una falsa superioridad y a las chicas actitudes de sometimiento forma parte del “valor” de educar. Los cuentos presentan modelos de vida, de la misma manera que lo hacen películas, video juegos o anuncios publicitarios. Hoy día, los cuentos cumplen con otro papel: hacer pensar.
(
www.educandoenigualdad.com/spip.php?article168)

En lugar de acusar al preciado legado histórico de los cuentos y difundir guías (por cierto, ¡en nombre de la democracia!) absolutamente instructivas, literales, simplistas y pre-programadas desde lo políticamente correcto,
¿por qué no difunden entre los educadores (e incluso en sus propias instituciones) la lectura de ensayos de grandes pilares en esta materia como Bruno Bettelheim o Vladimir Propp? ¿Por qué no dan a conocer obras como Mujeres que corren con los lobos de Clarissa Pinkola Estés?
Y, puestos a ello, por qué no impulsar también, desde el cuento moderno, a Gianni Rodari rescatándolo del olvido en el que va cayendo. Y a los Movimientos de Renovación Pedagógica, algunos de ellos agonizantes a su pesar. ¿Por qué no desempolvan con la famosa Memoria Histórica las Misiones Pedagógicas de la República Española o la Institución Libre de Enseñanza? De buena parte de ello, muchos de nuestros actuales maestros tienen un absoluto desconocimiento.
De lo que hay carencia es de promoción de la cultura, no de consumo de productos de apariencia cultural. En los últimos tiempos parece persistir un peligroso empeño en llamar “educación” a la “instrucción”.

También se mencionan los anuncios publicitarios, videojuegos y películas. Seguramente resultaría más coherente para una sociedad del siglo XXI dejar tranquilas en su contexto histórico las literaturas de origen oral y escrito, para pasar a analizar y controlar exhaustivamente la dudosa calidad de las programaciones infantiles (entre otras) en las cadenas de T.V., los videojuegos o los múltiples tintes sexistas de los anuncios publicitarios que los niños ven en abundancia.
En cuanto al cine, resulta un tanto insólito ver cómo se sigue promocionando desmesuradamente (hasta en braguitas y calzoncillitos) los productos Disney, mientras pasan imperceptibles de puntillas creaciones tan extraordinarias como las de Michel Ocelot, ese afro-francés realizador de cine de animación y autor de películas tan interesantes como Kirikú y la bruja. Un film que, respetando hasta la pulcritud los parámetros de los Cuentos de Hadas, da una magistral vuelta de tuerca contemporánea tanto al tratamiento de la violencia como al del sexismo. Eso sin hablar de otra de sus obras, inexistente en España, precisamente titulada Princes et Princesses. Seis excelentes ejemplos de cuentos del siglo XXI que, en lugar de demoler legados culturales ancestrales para construir sobre sus ruinas bobadas superficiales, se aúpa sobre ellos de forma inteligente y creativa.

El crecimiento; la madurez; el paso de la infancia al mundo adulto y todas sus consecuencias, pérdidas y ganancias; la búsqueda del equilibrio entre la esfera de lo racional y lo emocional; los ritos iniciáticos… son temas universales de la Literatura y de la especie humana en sí misma.
Los cuentos tradicionales nos hablan especialmente del crecimiento: a los niños abandonados o desamparados de los cuentos, acechados por lobos, ogros, brujas, encantamientos y todo tipo de agresiones o peligros, no se les está invitando a otra cosa que a crecer, a enfrentarse con los retos de la existencia. Los mágicos besos de Príncipe Azul que despiertan a las muchachas de su letargo de púberes, no son otra cosa que el despertar sexual. Las bodas dichosas de los cuentos del “fueron felices y comieron perdices”, no son sino una alentadora bienvenida al mundo adulto.
El tema, tanto del crecimiento físico (y envejecimiento), como del crecimiento interior con todos sus equilibrios y desequilibrios, son constantes de la Literatura Universal como lo son de la Historia de la Humanidad.
Los seres humanos deseamos con frecuencia aquello que, o hemos perdido, o no hemos alcanzado y, generalmente, mientras añoramos demasiado lo perdido y subvaloramos en exceso lo alcanzado, olvidamos que existe una armonía posible.
Una vez vivida - con mayor o menor fortuna -, la infancia, sabemos que, de cualquier modo, es una isla a la que nunca jamás, para bien o para mal, podremos regresar. Tal vez por eso se tiende a idealizarla. La quimera estriba en el sueño de poder recuperar exclusivamente de ella y para siempre sus más deliciosos encantos. Pero eso es patrimonio exclusivo de “ese adorable cretino” llamado Peter Pan, porque nosotros siempre estamos comenzando a crecer, y crecer suele conllevar sus controversias, sus dolores y sus pequeñas muertes. Vivimos, en definitiva, porque morimos (otra cosa es sobrevivir).
Para aliviar esos dolores, para atenuar el miedo, para explicarnos el mundo y seguir creciendo, tenemos a nuestro servicio ese “otro” lenguaje animado por la Voz Universal de la Humanidad, sin distinción de fronteras, espacios, tiempos, culturas, creencias o sexos.

Ana-Luisa Ramírez- Maestra .Asesora didáctica.

“La idea de que el aprender a leer puede facilitar, más tarde, el enriquecimiento de la propia vida, se experimenta como una promesa vacía si las historias que el niño escucha o lee son superficiales.”
Bruno Bettelheim